El partido entre Pitea y Umedalem casi recién había comenzado. Victor Brannstrom anotó rápidamente, pero poco después cayó desvanecido y empezó a convulsionar.
De inmediato fue llevado a un hospital cercano donde falleció. Así de trágica fue la jornada de la División II del fútbol sueco (cuarta categoría).
Lo que más llama la atención, es que Victor Brannstrom se había retirado de la actividad por un problema cardiaco y había regresado creyendo que no era de gravedad.
“Es completamente incomprensible. Es tan trágico. Es el palo más duro que he experimentado. El hecho de que volviera a jugar lo hace todavía más duro. Nosotros nunca le convencimos para que volviera, fue él quien quiso volver”, indicó el vicepresidente del club, Christer Berglund, tras conocer la terrible noticia.
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